La inteligencia artificial (IA) está transformando la educación, y el papel del docente es fundamental en este proceso, muchos docentes ven aún la inteligencia artificial como un enemigo, como un instrumento que loe estudiantes utilizan para evadir sus responsabilidades de aprendizaje, etc, sin embargo, aunque estos so algunos riesgos que se pueden correr, no es lo único a tener en cuenta. A continuación, exploraremos cómo los docentes podemos aprovechar la IA y cuáles son los desafíos que enfrentamos.
¿Qué es la Inteligencia Artificial?
La inteligencia artificial es la capacidad de las máquinas o los sistemas informáticos de realizar tareas que normalmente requieren inteligencia humana, como el reconocimiento de imágenes, el procesamiento del lenguaje natural o la toma de decisiones. La IA se basa en algoritmos que aprenden de los datos y se adaptan a las condiciones cambiantes. Por ejemplo, un sistema de IA puede reconocer las caras de las personas en una foto, traducir un texto a otro idioma o recomendar productos según las preferencias del usuario.
Aplicada a la educación, la IA tiene el potencial de hacerla más accesible, personalizada y efectiva. Por un lado, cada estudiante podría disfrutar de un aprendizaje personalizado según sus necesidades individuales. Asimismo, tendría acceso a contenidos adaptados, feedback inmediato y orientación personalizada. Por otro lado, puede facilitar el trabajo de los maestros, automatizando tareas administrativas o repetitivas, proporcionando herramientas de evaluación o análisis, o generando recursos didácticos innovadores.
Cómo Afecta la Inteligencia Artificial el Rol del Docente
De acuerdo a José María Segura, profesor de la Escuela de Posgrado de la Universidad Continental, “en la era pre internet, el propósito principal de un docente era portar conocimiento, contenido. Ahora, no solo ese contenido está distribuido y habilitado en formatos de fácil acceso sino que gracias a la inteligencia artificial, es accesible el formato de un conversador sabelotodo”.
Ya desde el inicio de la tercera revolución industrial, hacia 1970, con el uso del computador personal, y hacia los 90 con el acceso masivo a internet, el docente no es quien posee la información, en la red cada uno puede encontrar mucha información y el papel del docente empezó a transformarse drásticamente, hoy, hay mucha información, muchos formatos para transmitir esta información y ahora con la inteligencia artificial generativa, la información no la buscamos, la podemos crear con ayuda de la iA. Este nuevo escenario, nos plantea muchos desafíos, aquí, voy a abordar tres grandes desafíos que tenemos los docentes:
- Mantener la Calma:
- Es necesario bajar un poco las pulsaciones y las palpitaciones producto del estrés y de la angustia por lo desconocido. Nuestro cerebro interpreta el cambio como un peligro y la primera reacción siempre es huir o luchar ¿Has sentido esto cuando piensas en las TIC? ¿En la IA?
- La adaptación a las nuevas tecnologías requiere tranquilidad y apertura mental. Aquí en mi web, te ayudo para que hagas el proceso que necesitas y con aprendizaje puedas tomar mejores decisiones sobre el uso de las TIC en la formación.
- Incrementar la Actividad:
- Los docentes debemos entrar en acción, metiéndose en zonas incómodas para aprender cosas nuevas, lo peor que podemos hacer es entrar en una lucha con las tecnologías, prohibirlas, «no meternos en eso».
- La curiosidad y la disposición para explorar son esenciales. Como sabemos, sin curiosidad, no sería posible el conocimiento, es la curiosidad i el interés por el conocimiento las herramientas que han llevado al ser humano a desarrollar todo lo que conocemos hoy, necesitamos estas herramientas para construir nuevas habilidades para este nuevo mundo. Aquí, en humanidad digital encontrarás lo que necesitas para hacer el proceso con calma y paso a paso.
- Entender la Esencia de la Labor:
- El rol del docente va más allá de transmitir contenido; hoy, hay mucho contenido, hay mucha información, se produce conocimiento de forma exponencial, sin embargo, el papel de docente es ayudar al estudiante a descubrir cómo comprender el contenido, la utilidad del mismo y cómo ayudarlo descubrir por sí mismo la manera de aplicarlo para resolver problemas cotidianos.
- La inteligencia artificial aparece como un recurso que complementa la trayectoria del ser humano, quien siempre se ha interesado por apalancarse en herramientas e instrumentos para lograr alcanzar su capacidad inteligible y desarrollar su potencial al máximo. Por supuesto que hay riesgos, pero comprendiendo mejor las herramientas, podemos minimizar los riesgos.
¿Cómo podemos los docentes aprovechar la Inteligencia Artificial?
La IA puede liberarnos a los docentes de tareas rutinarias o mecánicas, y permitirnos dedicar más tiempo y atención a aspectos más creativos, emocionales o sociales del aprendizaje, es decir, a dedicarnos a lo verdaderamente importante. Veamos algunos ejemplos:
- Evaluación Automatizada:
- La IA puede automatizar el proceso de evaluación de tareas y exámenes, liberando tiempo para que los docentes se centren en actividades más significativas, como la enseñanza y el apoyo individualizado. Para esto, es importante tener en cuenta que reflexionar sobre la calidad de las respuestas generadas por la IA es crucial.
- Personalización del Aprendizaje:
- La IA permite adaptar el contenido y la metodología según las necesidades de cada estudiante. La IA puede convetirse en un asesor pedagógico que los docentes podemos utilizar para ofrecer feedback inmediato y orientación personalizada.
- Creatividad y Relación Humana:
- La IA libera tiempo para que los docentes se concentren en aspectos creativos, emocionales y sociales del aprendizaje, no podemos olvidar que la esencia de la labor docente sigue siendo la interacción humana y la conexión con los estudiantes. En lugar de pasar horas calificando test, y otras tareas que son tradicionales y que tal vez hoy, podríamos hacer de otra manera, podemos desarrollar y generar actividades con más interacción y socialización entre los estudiantes, que les. ayuden a resolver problemas en equipos, ahí el papel del docente es irremplazable.
En resumen, la IA es una herramienta poderosa, pero el corazón de la educación sigue siendo el maestro. Juntos, podemos aprovechar la tecnología para enriquecer el proceso de aprendizaje y preparar a los estudiantes para un mundo impulsado por la inteligencia artificial. Si eres de los docentes y formadores que quieren realmente transformar las vidas de tus estudiantes, que te inquieta cómo acceder a estas herramientas y cómo ayudar a tus estudiantes a utilizarlas para su beneficio, en humanidad digital te puedo ayudar para que lo consigas.
El miedo nos ayuda a tomar las precauciones que necesitamos para enfrentar nuevas situaciones, no debes dejar que el miedo te paralice. ¿Qué harías si no tuvieras miedo?